por CADTM, Oficina de prensa del Parlamento griego
publicado el 27 de abril de 2015
La composición, la misión y los primeros trabajos del Comité para la Verdad sobre la Deuda, creado por decisión de la Presidente del Parlamento helénico Zoe Konstantopoulou con el fin de investigar las causas profundas de la creación y expansión de la deuda pública, fueron presentados el 7 de abril de 2015 por la Presidente del Parlamento, la eurodiputada Sofia Sakorafa, responsable de las relaciones del Comité con el Parlamento Europeo y con los parlamentos extranjeros, y Éric Toussaint, coordinador científico del Comité.
La composición, la misión y los primeros trabajos del Comité para la Verdad sobre la Deuda, creado por decisión de la Presidente del Parlamento helénico Zoe Konstantopoulou con el fin de investigar las causas profundas de la creación y expansión de la deuda pública, fueron presentados el 7 de abril de 2015 por la Presidente del Parlamento, la eurodiputada Sofia Sakorafa, responsable de las relaciones del Comité con el Parlamento Europeo y con los parlamentos extranjeros, y Éric Toussaint, coordinador científico del Comité.
Durante la conferencia de prensa con los representantes de los medios de comunicación griegos e internacionales, la Presidente del Parlamento presentó los miembros del Comité y sus primeras acciones previstas para el próximo período. También detalló el programa de las tres jornadas de trabajo que se desarrollaron en el Parlamento griego, en las que participaron el Presidente de la República, el Primer Ministro, una quincena de miembros del gobierno, de diferentes instituciones del Estado, así como delegados de los movimientos sociales y ciudadanos comunes que contribuyeron a esta fundación histórica.
Aquí presentamos extractos de la conferencia de prensa para el «Lanzamiento del Comité para la Verdad sobre la Deuda Pública»:
Zoe Konstantopoulou (Presidente del Parlamento griego):
Señoras y señores, buenas tardes:
Esta conferencia de prensa se realiza para presentar el Comité para
la Verdad sobre la Deuda Pública, instaurado por decisión de la
Presidencia del Parlamento, con el fin de investigar las causas
profundas de la creación y la expansión de la deuda pública griega,
realizar una auditoría de esta deuda con el objetivo de determinar qué
parte de la misma es ilegal, ilegítima, odiosa o insostenible. Se trata
de establecer un argumentario sistemático de deslegitimación y de
deconstrucción de los argumentos, en cooperación con el Parlamento
Europeo y los parlamentos de los otros países miembros de la Unión
Europea, así como con las organizaciones internacionales pertinentes.
Esta misión será conducida de manera interactiva con la sociedad y por
lo tanto con los ciudadanos y ciudadanas de este país. La sociedad tiene
el derecho de saber qué fue lo que realmente pasó, cómo fue creada y
por qué creció esa deuda que pesa sobre la población.
El Comité creado por el Parlamento es la ilustración de ese derecho
democrático fundamental de los pueblos, de las sociedades y de la
ciudadanía a la verdad, la transparencia, la responsabilidad, la equidad
y la justicia social. Al mismo tiempo, expresa el deber democrático
elemental de aquellos que tienen la responsabilidad.
Como Presidente del Parlamento, he ejercido mi más elemental derecho
cívico al crear este Comité para responder a las exigencias de una
sociedad más justa y a la demanda de las ciudadanas y los ciudadanos de
conocer la verdad, esa verdad que muchos trataron de disimular o de
deformar con la ayuda de los medios de comunicación.
El 17 de marzo de 2015, hace sólo tres semanas, con Sofia Sakorafa,
nuestra diputada europea, fundadora y figura emblemática del movimiento
para la anulación de la deuda, que ha tenido un papel fundamental en la
primera Comisión Ciudadana para la Auditoría de la Deuda, y con Éric
Toussaint, que tiene un papel activo
en la descodificación del sistema deuda y en las reivindicaciones de la
anulación de la deuda ilegítima, dimos una conferencia de prensa. Allí
anunciamos la creación de este Comité y lanzamos simultáneamente una
invitación a todas las personas interesadas a contribuir en este
proceso. Esta invitación permanece abierta.
Insisto en que esta iniciativa representa un esfuerzo impresionante.
Desde el comienzo de los trabajos, el Comité ha sido criticado con el
argumento de que actuaría a puertas cerradas y que sus trabajos serían
efectuados dentro de la confidencialidad. |1|
Pero a la sesión inaugural del Comité del Parlamento que se realizó
el 4 de abril, pudo asistir todo el mundo. Era una reunión abierta. Y
vinieron: ciudadanos y ciudadanas comunes que habían pedido asistir;
periodistas que se tomaron el trabajo de observar todas las reuniones
difundidas en directo por la cadena parlamentaria, con excepción de la
última, que coincidió con la retransmisión de otra comisión, pero que
fue difundida algunas horas después en diferido.
Pudieron intervenir no solamente las y los que aceptaron ser miembros
del Comité, sino también aquellos y aquellas que querían expresar su
apoyo al Comité o expresar su compromiso a cooperar con el mismo.
Y ésta es la prueba de que un proceso innovador ha sido puesto en
marcha, por el que los dirigentes políticos, los actores sociales, los
representantes institucionales, así como los ciudadanos comunes y los
representantes de los movimientos sociales participaron en este
acontecimiento histórico, que fue la creación de este Comité.
Subrayo que este proceso no hubiera sido posible sin la total
cooperación y colaboración de Sofia Sakorafa, que asumió la parte
correspondiente a las relaciones del Comité con el Parlamento Europeo y
los parlamentos nacionales, y sin la implicación de Éric Toussaint, que
aceptó encargarse de la coordinación científica del equipo internacional
que nos ayuda. En este momento, antes de seguir, querría agradecer de todo corazón a
estos dos actores importantísimos para el funcionamiento del Comité.
Trabajamos desde el sábado 4 de abril hasta ayer, lunes 6 de abril.
Esta iniciativa fue anunciada hace tres semanas, durante una conferencia
de prensa pública [ http://cadtm.org/Eric-Toussaint-La-... ]. Lo digo para aquellos y aquellas que se sorprendieron y que parece que no conocen el Comité. En estas primeras sesiones de trabajo, tuvimos una representación del
Estado en su nivel más alto. El Presidente de la República estaba
presente y nos expresó su inequívoco apoyo. El Primer Ministro asistió a
la sesión inaugural, testimoniando de ese modo su respaldo al trabajo
del Comité. También había representantes de varias instituciones. Citaremos
brevemente a las dos presidentes de organizaciones judiciales, la
presidente del Sindicato de Jueces y Procuradores, la Sra.
Thanou-Cristofili, y la presidente de la Unión de Oficiales de Justicia
de la Corte, Sra. Androniki-Theotokatou; continuamos con el presidente
de la Autoridad de Control de los Mercados Públicos, Sr. Dimitrios
Rajko, el presidente de la Autoridad de la Lucha contra el Blanqueo y la
Corrupción, el procurador adjunto de la Corte Suprema, Sr. George
Pantelis, así como el vicepresidente del Banco de Grecia, y seguro que
me olvido de otros.
Estaban presentes funcionarios de la Cámara, pero no sólo su
secretario general y el secretario especial, sino también numerosos
funcionarios interesados por el proceso y, por supuesto, la Oficina del
Presupuesto de la Cámara, representada por su responsable, quien propuso
ayudar al trabajo del comité con todo el personal de su oficina. Igualmente, contamos con la presencia y la intervención del Servicio
Científico del Parlamento representado por el profesor Asterios Pliakos,
y también con la presencia del Sr. Koundourou y el Sr. Kanellopoulos,
responsables de departamentos que participarán activamente en el Comité.
No puedo dejar de citar a los miembros del Comité, nuestros invitados
internacionales, las personas que respondieron, sin dudar, a la
invitación para contribuir en este proceso de auditoría de la deuda para
que conozcamos la verdad. Quiero subrayar que estas personas tienen unas trayectorias muy
importantes en el dominio del análisis y anulación de la deuda pública,
en el campo de la economía social, los derechos humanos, la ciencia
política, y también en el ámbito de los movimientos sociales. Aceptaron
la responsabilidad que nosotros le propusimos sin ninguna remuneración.
Necesito resaltar que vinieron y han puesto a nuestra disposición su
trabajo y su tiempo durante este proceso de tres días, con
intervenciones muy importantes. Las voy a mencionar una por una.
En primer lugar, el Sr. Cephas Luminas, profesor de
derecho público y ex relator independiente del Alto Comisariado de las
Naciones Unidas por los Derechos Humanos, un experto de los efectos de
la deuda externa y las obligaciones financieras internacionales de los
Estados sobre los derechos humanos, en especial, sobre los derechos
sociales y culturales. Es también profesor honorario de Derechos
Humanos. El Sr. Lumina, en su calidad de representante oficial de las
Naciones Unidas, había preparado un informe muy importante, en 2013,
sobre la violación de los derechos humanos relacionada con el pago de
las deudas ilegítimas.
Quiero también mencionar al Sr. Olivier De Schutter,
profesor de la Universidad de Lovaina, en el Centro de Filosofía del
Derecho; ex relator especial de las Naciones Unidas sobre el derecho a
la alimentación, actualmente miembro del Comité de los derechos
económicos, sociales y culturales, en las Naciones Unidas.
También quiero mencionar a:
La Sra. Margot Salomón, profesora asociada de la
London School de Economía, directora del centro para el estudio de los
Derechos Humanos y del Laboratorio de Investigaciones avanzadas de la
economía mundial.
La Sra. Maria Lucia Fattorelli Carneiro, miembro del
Comité para la Auditoría de la Deuda en Brasil desde hace 15 años y
desde hace décadas inspectora de impuestos en el ministerio de Finanzas
de Brasil.
La Sra. Ozlem Onaran, profesora de Política y de
Desarrollo Económico en la Universidad de Greenwich, autora de más de
sesenta publicaciones sobre la desigualdad, el desarrollo y la crisis, y
que, recientemente, ha dirigido un programa bajo los auspicios de la
Oficina Internacional del Trabajo de las Naciones Unidas.
También quiero mencionar al Sr. Daniel Albarracín,
profesor de Sociología en la Universidad Complutense de Madrid, en el
departamento de Sociología, investigador en organizaciones sindicales en
Madrid y miembro de movimientos sociales contra la deuda ilegal.
El Sr. Sergi Cutillas Márquez, economista, miembro
del grupo de investigación sobre el dinero y el sistema financiero, en
Londres, e investigador en el Observatorio de la Deuda en la Globalización, en Barcelona.
El Sr. Patrick Saurin, doctor en Historia de la
Universidad de Toulouse-le Mirail, empleado de banca y autor de un libro
sobre los préstamos tóxicos, miembro del Colectivo por una Auditoría
Ciudadana de la deuda pública en Francia, así mismo es portavoz de SUD
BPCE, un sindicato de asalariados de la banca.
Igualmente quiero mencionar al Sr. Renaud Vivien,
jurista especialista en Derechos Humanos y cosecretario general del
Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo (CADTM).
El Sr. Michel Husson, economista en el Instituto
francés para la Investigación Económica y Social (IRES), quien ha
colaborado activamente con el Colectivo para la Auditoría Ciudadana de
la deuda pública en Francia.
El Sr. Olivier Bonfond, consejero económico del
Centro de Educación Democrática André Genot (CEPAG) en Bélgica y de la
Federación General del Trabajo de Bélgica.
La Sra. Christina Laskaridis, economista, doctoranda e investigadora del Corporate Watch de Londres.
El Sr. Diego Borja, ex ministro de Economía y ex presidente del Banco Central de Ecuador, ex miembro de la Asamblea Constituyente de Ecuador.
El Sr. Stavros Tombazos, profesor de Economía Política y de Filosofía Política en la Universidad de Chipre.
Espero no haberme olvidado de nadie y si así fuera el caso, Éric Toussaint me corregirá.
Permítanme ahora citar a los miembros griegos del Comité. Hay
participantes muy importantes en el mismo, que intervinieron durante el
proceso, en particular, George Kasimati, profesor de Derecho
Constitucional; Nikita Alipranti, profesor emérito de la Universidad de
Estrasburgo, ex profesor de la Universidad Demócrito de Tracia, miembro y
ex presidente del Comité Europeo de Derechos Sociales del Consejo de
Europa, que vigila la aplicación de la Carta Social Europea y miembro de
la Academia de Atenas; Aristides Kazakos, profesor de Derecho del
Trabajo en la facultad de Derecho de la Universidad Aristóteles de
Tesalónica; Sklias Pantelis, profesor de Economía Política Internacional
en la facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la
Universidad del Peloponeso, quien codirigió el trabajo colectivo «Economía política griega 2000-2010, el Mecanismo UEM Support».
Menciono también, a Spiros Marchetos, jurista, historiador y profesor
adjunto en el departamento de Ciencias Políticas en la Universidad
Aristóteles de Tesalónica y miembro fundador del Comité de Iniciativa
para la comisión de verificación; al abogado Dimitrios Miliarakis, que
también escribió sobre la anulación de la deuda en las relaciones
internacionales; a Christos Theodoropoulos, jurista de larga experiencia
en el Alto Comisariado de las Naciones Unidas para los Refugiados
(ACNUR) y representante de organizaciones internacionales y del
Observatorio de la Globalización; a Leonidas Vatikiotis, economista,
periodista y miembro fundador de la Iniciativa para la puesta en marcha
del Comité para la Auditoría de la Deuda; a Athanasios Contargyris,
economista y director de Innovación y Desarrollo Regional, miembro
fundador de ATTAC Grecia y miembro activo de la red europea de ATTAC; a
Despina Spanos, jurista, miembro de la Iniciativa para la comisión de
verificación en 2011, como representante de ADEDY y miembro del comité
de coordinación para la anulación de la deuda; a Nicholas Strobl,
director de Estadística de Grecia Central y las islas del mar Egeo en el
ELSTAT (la oficina de estadísticas) y profesor invitado en el
departamento de Estudios Superiores de TEI Pireo; a Georges Mitralias,
miembro fundador y responsable del Comité griego contra la deuda (CADTM
Grecia).
También tuvimos una intervención muy interesante de Sofia
Spiliotopoulou, persona muy activa en el Consejo de Europa y en la
Comisión Nacional de Defensa de los Derechos Humanos y Promoción de los
Derechos Sociales. Tenemos el consentimiento de su participación en el
Comité de Alice Giotopoulou-Marangopoulos, cuya reflexión emblemática es
una garantía para la protección activa de los derechos de reclamación;
de Hercules Aktypi, director de la Fundación Marangopoulos y abogado en
Grecia y en Francia, así como profesor de Derecho Internacional en la
Universidad de Edimburgo; de Emil Avgoulea, y del periodista y cineasta
Aris Chatzistefanou, autor de Debtocracy y Catastroika.
De nuevo, espero no haberme olvidado de nadie.
Quiero recordar el proceso del Comité. Con ocasión de la primera
conferencia de prensa invitamos al gobierno y a los organismos oficiales
responsables a comprometerse en la cooperación con el Comité poniendo a
su disposición toda la información y los servicios de sus ministerios
necesarios para la realización completa de la investigación.
Recibimos una respuesta impresionante de los miembros de los
gabinetes ministeriales. Fueron muchos los que asistieron a las sesiones
e intervinieron para aportar su apoyo y su compromiso de ayuda en el
trabajo. Contamos con la presencia del ministro de Defensa, Panos Kammenos, y
de la dirección general del ministerio de Justicia. También asistió el
ministro adjunto de Defensa, Kostas Ísijos. Todos prometieron que, con
respecto a la cuestión de los contratos de armamentos y sobre esa deuda
vergonzosa, contribuirán poniendo a disposición del Comité todos sus
datos.
También asistió el ministro de la Reforma Administrativa, Georges
Katrougalos, de quien quiero hacer una mención especial, pues ha sido un
miembro fundador y pionero en el proceso de creación de un comité de
auditoría de la deuda. Es un excelente abogado, especialista en Derecho
Constitucional y Científico. Le solicité entonces que coordinara los
contactos del Comité de auditoría con los ministros y sus ministerios.
Contamos con el ministro de Estado encargado de la lucha contra la
corrupción, Panagiotis Nikoliudis, quien ha aportado su sostén al
Comité, en particular en los casos de corrupción relacionados con el
endeudamiento.
Igualmente, estaba presente el ministro de Justicia, Nikos
Paraskevopoulos, que intervino en cuestiones de procedimiento en materia
de criminalidad económica contra el Estado.
Así mismo, el ministro adjunto de Asuntos Exteriores, Nikos Chountis,
que tiene la cartera de relaciones de las cuestiones europeas, quien ha
destacado la importancia de la responsabilidad que tienen las
instituciones europeas y las instituciones de las organizaciones
internacionales en la gestión del reembolso de la deuda.
El ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, que, contrariamente a lo difundido por ciertas informaciones tendenciosas, aportó su apoyo al Comité de auditoría.
El viceministro de Cultura, Nikos Xydakis, y el ministro de la Infraestructura, la Marina y el Turismo para el sector de infraestructuras, Chris Spirtzi, aseguraron igualmente su respaldo al comité.
El viceministro de Finanzas, que tiene la cartera, y el General
Accounting Office responsable del Tribunal de Cuentas y de la PDMA,
igualmente se han puesto a disposición de la Comisión. Esto tiene una
importancia muy grande, pues antes de la instauración del Comité de
auditoría para la verdad no hubo ninguna cooperación entre las partes
involucradas.
También estaba el ministro de Estado para la coordinación del trabajo
gubernamental, Terrence Kouik; la viceministra de Solidaridad Social,
Théano Fotiou; la viceministra de Trabajo encargada de la lucha contra
el desempleo, Rania Antonopoulos; el secretario de Estado para el
Desarrollo Rural, Panagiotis Spouridis; el viceministro de Medio
Ambiente en el ministerio de la Reconstrucción Productiva, John Tsironi.
Durante cuatro días, el comité prosiguió sus actividades y se
organizó repartiendo la tarea entre varios grupos de trabajo, definiendo
su programa para el período siguiente. En primer lugar, deseo anunciar
dos acontecimientos importantes:
– Los días 20 y 21 de abril, tendrá lugar en Roma la Conferencia de Presidentes de los Parlamentos de la U.E. Asistiré en tanto que Presidente del Parlamento griego. He invitado a que me acompañe a Sofia Sakorafa, miembro del Parlamento Europeo, encargada de las relaciones con los otros parlamentos nacionales, así como a Éric Toussaint, responsable de la coordinación científica del comité.
– Los días 20 y 21 de abril, tendrá lugar en Roma la Conferencia de Presidentes de los Parlamentos de la U.E. Asistiré en tanto que Presidente del Parlamento griego. He invitado a que me acompañe a Sofia Sakorafa, miembro del Parlamento Europeo, encargada de las relaciones con los otros parlamentos nacionales, así como a Éric Toussaint, responsable de la coordinación científica del comité.
Os agradezco la difusión, lo más amplia posible, de la información
sobre esta reunión. Nos referiremos al proceso de control de la deuda
ante los Parlamentos, hablando no solamente en nombre de Grecia, sino
del conjunto de los pueblos de Europa y del mundo.
– La segunda reunión de la comisión de auditoría tendrá lugar del 4 al 7 de mayo de este año.
Tendría aún muchas cosas que deciros, pero ya he hablado mucho y es
importante escuchar a Sofia Sakorafa, y luego a Éric Toussaint.
Dejo la palabra a Sofia Sakorafa,y os agradezco muchísimo vuestra atención.
Sofia Sakorafa (eurodiputada del Parlamento europeo):
Señoras y señores, buenas tardes:
Después de la dinámica intervención de la Presidente, yo sólo voy a
agregar algunos complementos. Debo agradeceros vuestra presencia y
vuestra acogida a la conferencia de prensa, que cierra un primer ciclo
de trabajo del Comité para la Verdad de la Deuda Pública. Es verdad que
estos tres días han sido muy productivos, tal como ha dicho la
Presidente, productivos no sólo en el seno del Comité, sino también en
el exterior. Pero el trabajo del Comité es atacado por quienes temen la
verdad, como ha dicho hace unos minutos la misma Presidente. La voluntad
de un control en profundidad exacerba las polémicas. El público será
invitado a participar al costado del Comité. Estamos determinados y
prestos a efectuar nuestro trabajo, nuestra tarea. Esta será la única,
pero implacable, respuesta a los juicios denigrantes de aquellos que se
oponen a la auditoría y se opondrán a sus conclusiones.
Contra los ataques, opondremos la defensa de la verdad y del interés
público. Contra las mentiras, opondremos la voluntad política de la
sociedad civil. Pues la fuerza del Comité para la Verdad sobre la Deuda
proviene de su deseo de encontrar la verdad, que es inversamente
proporcional a lo que ha prevalecido hasta ahora. Creemos en el poder de
la verdad documentada y no en la mutilación de los hechos. Creemos en
la participación de la sociedad y no en la marginación de los «sabios».
Creemos que los resultados del Comité serán herramientas útiles para
hacer frente a los acreedores, cualquiera que sea la forma en que se
realice.
Señores y señoras, durante tres días, economistas reconocidos,
constitucionalistas de renombre, docentes de dimensión internacional,
funcionarios de organizaciones internacionales, como las Naciones
Unidas, miembros del aparato del Estado han expresado su punto de vista
sobre la deuda. Durante tres días, representantes de colectivos,
asociaciones y organizaciones han declarado su disponibilidad para
contribuir a los trabajos del Comité. Durante tres días, ministros de
todos los ministerios involucrados se comprometieron a aportar su ayuda,
proporcionando todos los datos necesarios exigidos por la auditoría.
Durante tres días, con todas las personas, adheridas o no a alguna
institución, hemos determinado nuestro objetivo común: descubrir la
verdad sobre el crecimiento de la deuda, y desarrollar la metodología
del trabajo del Comité.
A partir de mañana, tenemos un único objetivo político: obtener la
más amplia participación posible en el proceso de auditoría. Por medio
de las organizaciones, de las asociaciones, de los colectivos, de las
instituciones del sector de la sanidad, de los ámbitos de la educación,
la cultura, el deporte, del gobierno de las comunidades locales y de los
movimientos sociales, porque es la sociedad civil la que paga de la
manera más implacable posible una deuda producida por otros. Incluso si
esto suscita temores, ha llegado el momento de la verdad para el sujeto
político, así como el del control del futuro de la propia sociedad. No
hay mejor iniciativa institucional que la que defiende la participación
social, que constituye el pilar de la democracia. Los resultados del
Comité constituirán una propiedad de la sociedad y no se mantendrán
limitados al interior de las fronteras. La forma como nació y creció
desmesuradamente la deuda será referida en el Parlamento europeo, ante
los parlamentos nacionales, y concernirá a todos los pueblos de Europa.
Este debate afecta principalmente a los pueblos de Europa, pues
sufren la propaganda incesante, según la cual hay por un lado una gente
ociosa y por otro lado una gente que trabaja duro, que con su esfuerzo y
su labor sale a rescatar a los otros y paga por ellos. En realidad, la
única cosa que hay que entender es que son los pueblos de Europa los que
han preservado y continúan alimentando con su sacrificio la «burbuja»
creada por el propio sistema, es decir, los bancos. Señores y señoras,
queridos amigos, plenamente conscientes de nuestra responsabilidad y del
peso de nuestro compromiso, os convoco a la próxima sesión del Comité.
Deseo buena suerte a la Presidente, porque sé que el combate será duro e
implacable. Muchas gracias.
Zoe Konstantopoulou (presidente)
Agradezco calurosamente a Sofia Sakorafa, de quien recibo mucho
coraje y fuerza, pruebas del valor de la colegialidad y la solidaridad,
de las cuales algunos tendrían que inspirarse. Es el turno ahora de
expresarse de Éric Toussaint, quien ha aceptado soportar la muy pesada
carga de garantizar la coordinación y el tratamiento científico de la
iniciativa mediante procedimientos que son, ellos también, sometidos a
la transparencia, lo que es una lección de colegialidad, y una lección
consecuente del servicio de la verdad y del interés público. Éric, tiene
usted la palabra.
Éric Toussaint (coordinador científico del Comité)
Tengo que expresar, con respecto a las más altas autoridades del
país, comenzando por la Presidente del Parlamento griego, la enorme
satisfacción que sentimos todos los delegados, expertos extranjeros, que
hemos venido a Atenas para participar en la primera sesión del Comité
que establecerá la verdad sobre la deuda griega. La satisfacción que
experimentamos al comprobar que esta iniciativa es apoyada por los
diferentes ministros, por diferentes administraciones, por diferentes
instituciones, por el Presidente de la República, por el Primer
Ministro. Los miembros del Comité que ha de establecer la verdad sobre
la deuda griega deseamos aportar nuestra colaboración en este trabajo de
salubridad pública, que consiste en comprender por qué un país como
Grecia ha llegado a la actual situación. Se trata de explicar por qué al
pueblo griego le reclaman que pague una deuda que representa cerca del
180 % de la producción anual de riqueza nacional.
Para el equipo internacional y los miembros griegos se trata de
analizar en forma extremadamente rigurosa las deudas que, actualmente,
se reclaman a Grecia. Después de ese examen serio y exhaustivo,
presentaremos un informe al Parlamento griego que permita identificar
los segmentos de la deuda pública griega que pueden ser considerados
ilegítimos, ilegales, odiosos o insostenibles. Sabiendo que una deuda
ilegítima es una deuda contraída contra el interés general y a favor de
una minoría privilegiada; sabiendo que una deuda ilegal es una deuda
contraída sin respetar las leyes y la Constitución del país; sabiendo
que una deuda odiosa es una deuda contraída en condiciones que implican
violaciones graves de los derechos humanos fundamentales garantizados
por una serie de tratados y convenciones internacionales, a los cuales
los Estados y las instituciones no pueden escapar porque los han
ratificado; sabiendo que una deuda insostenible es una deuda cuyo
reembolso impide a los poderes públicos garantizar a los ciudadanos del
país el ejercicio de sus derechos humanos fundamentales.
Sabiendo también que una deuda odiosa responde a tres criterios
complementarios, definidos por numerosos juristas internacionales así
como en el marco de los informes oficiales de las Naciones Unidas, que
son los siguientes:
— Falta de consentimiento de la población involucrada en el momento de la realización del préstamo;
— falta de beneficio para la población involucrada tras el endeudamiento;
— y el conocimiento de los acreedores de las dos condiciones anteriores.
— falta de beneficio para la población involucrada tras el endeudamiento;
— y el conocimiento de los acreedores de las dos condiciones anteriores.
Nosotros vamos, por lo tanto, a analizar las deudas que son
reclamadas a Grecia por las instituciones que, hasta hace poco,
constituían la Troika,
y vamos a ver si, en el momento de la concesión del préstamo, la
población griega había sido consultada, si sus representantes (los
parlamentarios griegos) deliberaron sobre las condiciones en las que las
deudas fueron contraídas. Se trata así de verificar si hubo un
consentimiento de la población concernida.
Vamos a analizar el impacto de estas deudas y ver si sirvieron para
mejorar las condiciones de vida de la población griega, es decir si
beneficiaron a la población griega, y vamos a ver si los acreedores que
las reclaman eran conscientes de que las condiciones fijadas en el
momento de la contratación de las deudas podían conducir a causar daños a
la población griega. Así, vamos a proceder a un examen extremadamente
riguroso y esperaremos hasta el fin de nuestro trabajo para comunicar
los resultados.
No nos preguntéis, al comienzo de los trabajos, cuáles serán los
resultados ya que realizaremos nuestra misión muy seriamente, y haremos
públicas nuestras conclusiones una vez que hayamos alcanzado un consenso
en el Comité de auditoría. Consenso en base a unas profundas
investigaciones, después de haber estudiado los documentos necesarios, y
haber escuchado las declaraciones, ante el Comité, de algunos
protagonistas clave del proceso de endeudamiento.
Señoras y señores, queridos amigas y amigos, Sra. Presidente, Zoe
Konstantopoulou, Sra. eurodiputada, Sofia Sakorafa, puedo deciros que lo
que estáis en vías de hacer, y a lo que nosotros aportamos nuestro
apoyo, es histórico. Hasta ahora no ha habido ningún Parlamento, en el
mundo, que haya establecido tal mecanismo de transparencia democrática
sobre los fondos públicos, que haya previsto la participación ciudadana y
la ponga realmente en práctica, en particular informando integralmente a
la población por medio de la cadena de televisión del Parlamento
griego. Creo que son cada vez más los ciudadanos y ciudadanas griegos
que miran la cadena parlamentaria. Mientras que en muchos de nuestros
países las cadenas parlamentarias transmiten sesiones más bien aburridas
de debates parlamentarios ante unos hemiciclos semivacíos, aquí, en
Grecia, se combina, por supuesto, la transmisión de debates
parlamentarios, lo que es absolutamente necesario, con la transmisión de
actividades como ésta. Visiblemente, esto despierta un interés
sumamente importante en una parte creciente del público. Puedo
aseguraros que si hacéis el esfuerzo de subtitular la sesión que se
desarrolló el sábado en presencia de las más altas autoridades del país
vía las redes sociales, este programa circulará y será visto en todo el
planeta, porque los ciudadanos y ciudadanas están ávidos de democracia,
de transparencia, de búsqueda de la verdad, ¡eso es democracia! Y esa es
la condición sine qua non de la democracia, que muy a menudo no se
lleva a la práctica en unos países que deberían aplicarlo.
Con lo que se ha emprendido y anunciado en buena y debida forma a la
comunidad internacional, algunos de vosotros serán escuchados en lugares
clave del planeta, puesto que el 99 % de la población desea comprender
por qué su vida está condicionada y determinada por un reembolso de una
deuda cuyo proceso no fue objeto, generalmente, de una fundamental y
democrática participación ciudadana.
Gracias de todo corazón, en nombre de todos los miembros del comité
de auditoría, gracias a vosotros, gracias Sofia, gracias Zoe
Konstantopoulou, gracias a las autoridades de este país que dan este
ejemplo de democracia a todo el planeta.
Nota bene del CADTM: No hemos publicado más que las
tres introducciones de la conferencia de prensa, que duró dos horas y
media. Durante la misma, algunos periodistas de la prensa opositora
intentaron cuestionar la legitimidad, el principio y las condiciones de
funcionamiento del Comité de auditoría, pero cada vez, Zoe
Konstantopolou, apoyada en documentos y cifras, replicó a sus
detractores demostrándoles su ignorancia y su mala fe. Por ejemplo:
Los debates del Comité, serían confidenciales: la Presidente del
Parlamento respondió que todos los debates habían sido difundidos en
directo y son accesibles en la cadena parlamentaria.
El Comité le saldría caro a los griegos, en particular en gastos de
comida: con cifras y facturas en la mano, la Presidente demostró que la
comida de los miembros del Comité (con una media de 19 €, y un costo de
10 € de la comida del mediodía, en la cantina del Parlamento) es dos
veces menos que las facturas de la época de los gobiernos precedentes.
Zoe Konstantopoulou recordó que los miembros del Comité trabajaban
voluntariamente, mientras que el gabinete de consejo elegido por el
anterior gobierno para defender los intereses de Grecia en el proceso
contra la firma alemana Siemens, facturaba sus servicios a más de 500 €
la hora, o 300 € la media hora… para un resultado nulo, dado que como
contrapartida de las 350 horas facturadas, Grecia no obtuvo ninguna
indemnización y se encontró en la obligación de iniciar una nueva acción.
Fuente: : http://www.hellenicparliament.gr/En...
http://cadtm.org/Grecia-Conferencia-de-prensa-sobre