El CADTM sostiene, participa, aplaude y convoca a
las movilizaciones.
Cientos de miles de asalariados, tanto del sector público como del
privado, de universarios, de estudiantes de secundaria y de precarios
juntos en las calles los días 9, 17, 24 y 31 de marzo así como el 5 y el
9 de abril. Es necesario remontarse al otoño del 2010 para encontrar un
nivel de movilización tan masivo e importante en Francia. La
determinación y la construcción de la convergencia no flaquea; pese a la
represión policial dirigida contra la juventud y destinada a cortar los
lazos fraternales entre los asalariados y los estudiantes esta unidad
no se debilita. Un apabullante 70% de la población rechaza este proyecto
de ley.
En el otoño del 2010 la lucha fue por la
defensa de las pensiones y hace falta ir hasta el 2006 durante la
movilización contra el contrato de primer empleo para rememorar un
movimiento victorioso. Lecciones importantes han sido aprendidas de
estas dos luchas de resultados tan diferentes.
El CADTM celebra la unidad de este movimento popular y su determinación
El CADTM saluda esta unidad extraordinaria de sindicatos (CGT, FSU,
Solidaires, FO y de organizaciones juveniles de estudiantes y
universitarios) en torno al rechazo unánime de este proyecto de ley.
Este movimiento es un catalizador de la cólera y el rechazo social y
ciudadano. Dentro de los sindicatos CFDT y CGC, cuyas direcciones
aprueban el proyecto de ley del gobierno, la contestación interna va en
aumento y secciones sindicales participan en las manifestaciones. Luchas
sectoriales y otras que tuvieron origen diverso (el caso de los
sindicalistas condenados de Goodyear, las luchas unitarias a Mayotte por
la igualdad real, aquellas de la Coperl en Lamballe contra la bajada de
salarios) vuelven a reactivarse y unifican sus acciones.
Este movimiento unitario converge con el de las asambleas generales
permanentes en las grandes ciudades (como las iniciativas de nuit
debout). Estas asambleas populares van mucho más allá de la mera
exigencia de la retirada del proyecto de ley. Estas vienen a cuestionar
la vida política en su conjunto, como lo hicieron en España y en los
EEUU los movimientos de los indignados y de occupy Wall Street. Estas
iniciativas plantean cuestiones sobre la democracia real y sobre el
bloqueo de la economía como medio de lucha.
La confluencia de estos dos aspectos del movimiento social es
enriquecedora y supone una fuerza añadida que vuelve la victoria contra
el gobierno y la patronal posible.
Para la patronal y para el gobierno francés el reto es enorme:
- - Para la patronal francesa que cuenta con la complicidad activa de un gobierno que se dice „socialista“, se trata ni más ni menos que de desmantelar las protecciones sociales colectivas e individuales por medio de la inversión jerárquica de las normas contenidas en el Código Laboral. Por medio de esta reforma, la patronal busca hacer retroceder las condiciones laborales para así poder incrementar sus beneficios y desactivar los elementos que vínculan entre sí a los asalariados (los convenios colectivos y el Código Laboral). Se busca de esta manera recuperar el retraso con respecto a otras patronales europeas que con la connivencia de la Unión Europa ya lograron suprimir estas protecciones sociales en los países del este europeo a principios de los años 90 y desde entonces en, prácticamente, todos los demás países europeos (una de las primeras medidas de la Troika en Grecia ya con el primer memorándum del 2010 consistió en eliminar los convenios colectivos).
- - Para el gobierno de Hollande-Macron, se trata de eliminar el freno más importante a la puesta en marcha de un plan de austeridad de gran amplitud como el que ya fue llevado a cabo en otros países de la OCDE. Después de la implantación del estado de urgencia y su visión securitaria de la sociedad y su fracaso en la tentativa de imponer un proyecto demagógico y xenófobo con la ley para la pérdida de la nacionalidad, el gobierno permanece inmune ante las exigencias de la población en lucha mientras que es enormemente receptivo a las propuestas de la patronal y de sus accionistas.
Con motivo de las negociaciones en curso sobre el seguro de desempleo
y con el pretexto de las deudas de la UNEDIC (el seguro de desempleo),
el gobierno se alinea claramente con las posturas de la MEDEF (patronal
francesa similar a la CEOE española) proponiendo medidas que conducen a
la bajada de las prestaciones por desempleo y a la desaparición del
servicio público de empleo.
Como respuesta a todo ello asambleas generales gigantescas y
unitarias de trabajadores intermitentes se reúnen en las principales
ciudades de Francia como fue el caso el 4 de abril en el Teatro de la
Colina con más de 1000 participantes, y muestran una voluntad combativa
para vincular las cuestiones del seguro de desempleo en pleno
desmantelamiento por el gobierno la MEDEF, la CFDT y la CFTC, con la lucha contra „la ley del trabajo“.
El 1 de abril se comenzó a aplicar la nueva reducción en las
cotizaciones para las prestaciones familiares que llevan a 33.000
millones el montante de regalos fiscales a las empresas, cantidad que
deberá alcanzar los 41.000 millones en 2016.
Estas reducciones en las cotizaciones son financiadas con cargo a los
presupuestos del Estado, obligando a éste a endeudarse aún más con los
mercados financieros y enriqueciendo a los acreedores, algunos de los
cuales aparecen mencionados en los ficheros de los Papeles de Panamá.
Este dinero público, otorgado sin ningún tipo de control posterior a
las empresas, no mejorará en nada la situación del empleo pero
favorecerá aún más las inversiones especulativas que suponen un riesgo
real para la economía.
En Francia como por todas partes en Europa, el capitalismo quiere
hacer pagar la crisis a los asalariados. Esto le resulta imprescindible
para continuar su carrera alocada por los beneficios y para acrecentar
el control del sistema deuda
sobre los estados, con el objetivo de poder obligarles a ampliar los
planes de austeridad e imponer memorandums contra la población.
Pero, que tengan cuidado porque las reacciones se multiplican y se
revelarán cada vez más dolorosas para ellos. Las luchas se diversifican y
la movilización aumenta. No estamos dormidos, ¡estamos despiertos y
atentos! Esto es lo que muestra el moviento social en Francia.
Traducción: David García Delgado
Fuente: http://cadtm.org/Francia-Movilizaciones-contra-la